Washington, Estados Unidos.
El presidente Trump prometió defender la libertad religiosa y “destruir” una ley que limita la participación política de los credos religioso.
Según Trump, la libertad de religión es “un derecho sagrado” que actualmente está “bajo amenaza”, tanto en Estados Unidos como en el resto del mundo.
Sobre la llamada Enmienda Johnson, que establece que los credos religiosos y otras organizaciones exentas de impuestos no están autorizados a hacer campaña o apoyar abiertamente a candidatos a cargos políticos, Trump aseguró que la “destruirá totalmente”“Permitiré que nuestros representantes de la fe hablen libremente y sin temor a represalias”, agregó a continuación.
Esa Enmienda Johnson, vigente desde 1954 y cuyo desmantelamiento dependería del Congreso, establece que las confesiones religiosas no pueden involucrarse en actividades políticas y, si lo hacen, corren el riesgo de perder los beneficios de estar exentas de impuestos.
“El terrorismo es una amenaza fundamental a la libertad religiosa.
Debe terminar y se terminará”, remarcó Trump en otro momento de su intervención.
Además, dijo que su Gobierno hará “todo lo posible” para “proteger la libertad religiosa en esta tierra” y que Estados Unidos “debe ser siempre una sociedad tolerante donde todas las creencias sean respetadas”.