Washington, Estados Unidos.
Las expulsiones de inmigrantes indocumentados se redujeron en los tres primeros meses del gobierno de Donald Trump, pese a la promesa del presidente estadounidense de acelerar la deportación de indocumentados.
Según el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), 54,564 personas han sido expulsadas del territorio estadounidense desde la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca el 20 de enero, 12% menos que en el mismo período del año pasado.
La administración Trump reforzó los medios para perseguir a los inmigrantes sin documentos, incluso en las ciudades que eligieron protegerlos.
El magnate afirmó que su gobierno concentraría sus esfuerzos en deportar a los inmigrantes con antecedentes criminales, sin embargo, al menos 600 de los deportados no tenían delitos.