Ciudad de México.
En la Selección de México hay todo menos nervios por enfrentar a Honduras y Estados Unidos por la eliminatoria rumbo al Mundial Rusia 2018.
A dos días de que México empiece a jugarse una buena parte del boleto al Mundial de Rusia 2018, lo único que impera en el equipo de Juan Carlos Osorio es seguridad y alegría.
Para la práctica vespertina, la única del día de ayer, los primeros en saltar a una de las cancha fueron Guillermo Ochoa, Rodolfo Cota y Alfredo Talavera, quienes se pusieron a las órdenes de Mario Marín, entrenador de porteros de la Selección Nacional.
Ahí lo que imperó fue la seriedad, como si ninguno tuviera seguro su puesto en el once titular para los partidos ante los catrachos y el equipo de las Barras y las Estrellas.
Unos metros adelante estaba la verdadera fiesta, ésa que se encargaron de montar Javier Hernández, Diego Reyes y Raúl Jiménez, durante el torito, donde sufrieron y mucho Carlos Vela y Daniel Hernández.
"Dale Flaco, toca, toca Flaco", le gritaba "Chicharito" a Reyes quien no paraba de reir y gritar al ver que Vela no alcanzaba los balones que corrían por en medio del rondo.
El "Burrito" libró su propia batalla, la de los malos pases, porque parecía que la pelota le quemaba cada vez que se acercaba, y para su mala suerte cada 20 toques consecutivos era un "zape" a cambio.
El Tri también contó con las incorporaciones de Jesús Molina, Giovani dos Santos y Jesús Dueñas, quienes se entrenaron al parejo de su compañeros, no así Andrés Guardado y Néstor Araujo, quienes se mantienen en recuperación de sus respectivas lesiones.